El Sindicato de Obreros Marítimos Unidos (SOMU), bajo la dirección de Raúl Durdos, ha levantado una enérgica voz de rechazo ante la propuesta de reintegrar el Impuesto a las Ganancias en el ámbito de la pesca.

En una muestra de unidad y determinación, los trabajadores marítimos han expresado su descontento enérgicamente, alegando que "El salario no es ganancia" y demandando un alto al "robo con el impuesto". Esta postura ha sido reforzada por declaraciones desde las plataformas digitales del SOMU, donde se manifiesta una profunda preocupación ante la reciente decisión del Gobierno de Javier Milei.

Los trabajadores, conscientes de la importancia de su labor para el país, han hecho hincapié en el esfuerzo, dedicación y sacrificio que implica su trabajo en la industria pesquera. Argumentan que esta carga impositiva compromete su estabilidad económica y la de sus familias, añadiendo una presión adicional a un entorno laboral ya de por sí desafiante y muchas veces injusto.

Sin embargo, el SOMU ha dejado claro que su postura no es de confrontación absoluta, sino de búsqueda de soluciones equitativas que beneficien a todos los involucrados. Están abiertos al diálogo y a trabajar conjuntamente en la búsqueda de alternativas que no pongan en riesgo su dignidad ni su estabilidad.

El rechazo del SOMU al Impuesto a las Ganancias en el sector pesquero es firme y contundente, respaldado por la convicción de que esta medida representa una amenaza para la economía de los trabajadores y sus familias. Su llamado al diálogo y a la búsqueda de soluciones justas refleja su compromiso con el bienestar colectivo y la defensa de sus derechos laborales.