A comienzos de abril, el Directorio de YPF, designado por Milei, presentó una propuesta sorprendente: aumentar sus salarios a la suma de 77 millones de pesos.

El cálculo es claro: con 11 directores en total, la intención es disponer de 10 mil millones de pesos para sus honorarios, lo que equivale a 71,3 millones más aguinaldo.

En este reparto de posiciones y áreas de control durante el mandato de Milei, el principal beneficiario es Paolo Rocca, quien lidera la compañía estatal YPF desde su estatización y tiene influencia significativa sobre el yacimiento de Vaca Muerta. Rocca, reconocido empresario de los sectores siderúrgico y petrolero, es uno de los pocos argentinos que figura en la lista Forbes global. Su respaldo a gobiernos desindustrializadores no pasa desapercibido, y en esta ocasión, YPF se presenta como un jugoso botín.

Horacio Marín, proveniente de Tecpetrol, asume como presidente y CEO de YPF S.A., mientras que otros nombres de peso se suman al directorio:

• Matías Farina, también de Tecpetrol, encabeza el área de Exploración y Producción.
• Gustavo Gallino, proveniente de Techint, asume como vicepresidente de infraestructura, un rol crucial para las ambiciones de Tecpetrol en Vaca Muerta.
• Federico Barroetaveña, con experiencia en el área financiera de Techint, se desempeña como director financiero de YPF.
• Lisandro Deleonardis, con experiencia en relaciones institucionales en Techint, ahora es Vicepresidente de Asuntos Públicos en YPF.

Además, Rocca coloca a Luis de Ridder, ex gerente de Petróleo de Tecpetrol, como subsecretario de Hidrocarburos, y a Horacio Amartino, de Presupuestos, Planning y Control de Techint, como director de la Unidad Ejecutora de Gasoductos, un negocio de interés para Rocca.

Es evidente el interés de Rocca en áreas clave, incluso más allá de YPF, con la colocación de funcionarios en la Secretaría de Trabajo. Miguel Ponte, Julio Cordero y Ernesto Rona, todos provenientes de Techint, ocupan roles relevantes en esta área.

YPF refleja el poder económico local bajo el gobierno de Milei, con figuras como Nicolás Posse, conocido por su asociación con el grupo Eurnekian, desempeñando roles destacados en la compañía estatal. Posse, con un currículum que destaca su experiencia en diversas industrias, es un director que genera interrogantes debido a su falta de experiencia en el sector hidrocarburífero.

La presencia de funcionarios vinculados al Grupo Eurnekian en YPF, como José Rolandi, plantea preocupaciones éticas y legales, especialmente considerando los potenciales conflictos de interés. A pesar de las afirmaciones de Rolandi sobre su rol honorario, es necesario aclarar la percepción de honorarios por parte de YPF.

El gobierno de Milei ha implementado una serie de medidas que benefician a empresas vinculadas a estos directivos, desde desregulaciones en el sector hidrocarburífero hasta políticas fiscales y laborales favorables.

Esta estrecha relación entre el gobierno y ciertos empresarios plantea interrogantes sobre los intereses que representa YPF y quiénes son sus verdaderos beneficiarios.

Fuente: Pagina12