El arribo de un guardacostas estadounidense a Buenos Aires ha generado controversia debido a la imposibilidad de realizar ejercicios conjuntos con Prefectura Naval.

El gobierno argentino está elaborando una resolución para permitir actividades protocolares de este patrullero, argumentando la necesidad de combatir la pesca ilegal, principalmente de flotas chinas, en aguas argentinas del Atlántico Sur.

El USCGC James (WMSL-754), perteneciente a la Guardia Costera de EE.UU., llegará al puerto de Buenos Aires entre el 29 de abril y el 3 de mayo. Sin embargo, debido a la falta de sanción de la Ley de Bases propuesta por la Presidencia de Javier Milei, no podrá llevar a cabo ejercicios conjuntos con Prefectura Naval.

Esta situación evidencia tensiones geopolíticas entre Estados Unidos y China, especialmente en áreas como la observación espacial en Neuquén. Además, se interpreta como una intromisión en la soberanía marítima argentina, siendo percibida como una muestra de la política intervencionista de Estados Unidos a nivel mundial.

Anteriormente, funcionarios estadounidenses habían visitado Argentina y generado controversias políticas, incluso anunciando la construcción de una Base Naval Integrada en Ushuaia con participación de Estados Unidos, lo que ha sido criticado como una cesión de soberanía por parte de Argentina.

La propuesta inicial de la "Ley Ómnibus", presentada por Milei, buscaba autorizar la entrada de tropas extranjeras para participar en ejercicios conjuntos con Prefectura Naval, pero no fue sancionada. Ahora, la ministra de Seguridad, Patricia Bullrich, prepara un decreto para permitir únicamente actividades protocolares del guardacostas estadounidense.

Este no es el primer episodio de desencuentro entre Argentina y Estados Unidos en materia de patrullaje marítimo. En años anteriores, patrulleros estadounidenses han realizado escalas en puertos argentinos sin poder llevar a cabo operativos conjuntos, debido a la falta de autorización legislativa.

La llegada del USCGC James y las tensiones que genera evidencian la compleja dinámica geopolítica en la región y la lucha por el control de los recursos marítimos, especialmente frente a la presencia de flotas ilegales, mayormente chinas, en aguas argentinas.

Fuente: AgendaMalvinas