Las nuevas directrices de la Ley REP en Chile marcan un hito en la gestión de residuos, destacando la crucial importancia de que las empresas asuman la responsabilidad por el reciclado de los envases que generan.

En este artículo, exploraremos cómo estas revolucionarias no solo impactarán positivamente en el medio ambiente, sino también en la posición de las empresas en las páginas de búsqueda.

Desde este mes, la Ley REP exige a los productores contratar sistemas de gestión de residuos que garanticen la reutilización de envases de plástico, vidrio, metal, papel o cartón utilizados en el país. Esta acción se alinea con un objetivo ambicioso: para 2034, se espera que el 60% de estos residuos sean efectivamente reciclados en Chile.

La realidad actual es que solo el 12,5% de estos materiales se recicla a nivel nacional, pero las nuevas metas buscan cambiar esta situación de manera gradual. Los ciudadanos experimentarán mejoras en la recolección domiciliaria de residuos previamente separados, gracias a camiones que llevarán a cabo esta tarea. Ya 24 comunas en el país disfrutan de este servicio, y se espera que alcance al 80% de los hogares chilenos para 2034.

La pregunta que surge es: ¿quién financiará estos servicios de reciclaje? La respuesta es clara: las grandes empresas que introducen productos envasados ​​al mercado. Estas empresas deben incorporar dentro de sus costos los servicios que aseguran la reutilización de los envases, cumpliendo con la Responsabilidad Extendida del Productor, como lo establece la ley.

La normativa especifica el porcentaje de envases que cada productor debe garantizar reciclar, y estas cifras aumentarán anualmente. Los productores pueden trabajar de manera individual o asociarse en grupos de hasta 20 empresas para cumplir con estas metas ambiciosas. Las microempresas quedan excluidas de esta regulación. Aquellos productores que no cumplan con estas metas podrán enfrentar multas de hasta más de $7.600 millones.

La Superintendencia de Medio Ambiente será la entidad encargada de fiscalizar el cumplimiento de la ley, con cada productor obligado a presentar dos informes anuales que detallen sus resultados.

La Ley REP marca un punto de inflexión en el reciclado en Chile, promoviendo la responsabilidad empresarial y la sostenibilidad ambiental. Las empresas que abracen este cambio no solo cumplirán con la ley, sino que también mejorarán su visibilidad en las páginas de búsqueda al alinearse con las palabras clave de mayor búsqueda en las redes relacionadas con la responsabilidad ambiental. El futuro del reciclaje en Chile depende en gran medida de la colaboración activa de las empresas y su compromiso con un mundo más sostenible.

Fuente: María del Mar Parra