La próxima movilización de los trabajadores estatales, encabezada por la Asociación Trabajadores del Estado (ATE), promete ser un evento de gran relevancia en el panorama político y laboral argentino.

Esta manifestación se llevará a cabo frente al Instituto de Agricultura Familiar, Campesina e Indígena, ubicado en la Av. Paseo Colón 982 de la Capital Federal, como respuesta al descontento generado por diversas problemáticas que afectan al sector público.

Uno de los puntos centrales de la protesta es el rechazo al aumento salarial del 8% propuesto en las recientes paritarias, considerado insuficiente por parte de los trabajadores y sindicatos involucrados. Además, se alza la voz en contra de los despidos masivos que se avecinan, con más de 70 mil vínculos laborales próximos a vencer el 31 de marzo, de los cuales el Gobierno planea rescindir un alarmante 30%.

La jornada de protesta incluirá una serie de actividades destinadas a visibilizar y reforzar las demandas de los trabajadores estatales. Desde ruidazos en ministerios hasta cortes de rutas en diversas regiones del país, se espera una movilización masiva en defensa de los derechos laborales y contra las políticas de ajuste implementadas por el Gobierno.

Entre las principales exigencias de ATE se encuentran la renovación automática de los contratos laborales próximos a vencer, la reincorporación de los despedidos injustamente, un aumento salarial que supere la inflación y la regularización laboral de los trabajadores precarizados. Asimismo, se rechaza enérgicamente el cierre de organismos públicos y la privatización de empresas estatales, así como se defiende el Fondo de Garantía de Sustentabilidad (FGS) y se reclama un aumento de emergencia para jubilados y pensionados.

Esta movilización promete marcar un hito en la lucha por los derechos laborales en Argentina y enviar un claro mensaje al Gobierno sobre la importancia de escuchar y atender las demandas legítimas de los trabajadores.