El Ministro de Economía de Argentina, en conjunto con el embajador de China, ha afirmado recientemente que la decisión del país de cambiar de dólares a yuanes para pagar sus importaciones chinas mejorará la perspectiva de reservas de Argentina en términos de reservas netas.

El Ministro de Economía de Argentina, Sergio Massa, anunció el miércoles pasado que el país utilizará yuanes por el equivalente a US$ 1.040 millones para importar bienes intermedios de China. Massa hizo el anuncio en el Palacio de Hacienda en compañía del embajador de China en Argentina, Zou Xiaoli, el presidente del Banco Central, Miguel Pesce, funcionarios de la Aduana Nacional y empresarios privados cuyas compañías demandan bienes del país asiático.

El ministro destacó que Argentina “tiene un swap con China que no solo sirve para fortalecer las reservas, sino también para fortalecer el intercambio bilateral". Esta medida también es la garantía de seguir produciendo con bienes intermedios procedente de China, evitando la triangulación detectada, que de alguna manera se utilizaban para pagar más caro lo que importaba Argentina, de lo que (el intermediario) compraba más barato" en el país de origen de la manufactura.

Según Massa, "La mayor sequía de la historia, que nos dejó con US$ 15.000 millones menos para exportar nos obligó a nosotros, y al Fondo Monetario Internacional, a redefinir el programa de importaciones y exportaciones". En este sentido, "el Programa de Incremento Exportador, no solo con la soja, sino también con las economías regionales, comienza a dar señales de buen funcionamiento, y también nos obliga a repensar nuestras importaciones", explicó.

Además, Massa recordó que Argentina tiene un swap con China que no solo sirve para fortalecer las reservas del Banco Central, sino que, a través de la buena voluntad y del trabajo de todos los sectores, permitirá acceder a quienes necesiten de bienes intermedios, sin poner en riesgo nuestras reservas.

Este acuerdo con el Banco Central Argentina, el Banco Popular de China y el Banco Internacional de Comercio de China (ICBC) permitirá acceder a bienes intermedios sin comprometer las reservas del Banco Central. También permitirá adelantar el ritmo de estas importaciones, la mayoría de las cuales se hacían con autorizaciones a 180 días, y con los yuanes se harán a 90 días. En resumen, esta medida representa una forma de fortalecimiento del comercio bilateral y una garantía para la producción nacional.

Fuente: Telam