La temporada de balnearios comenzó este fin de semana con gran presencia de bañistas sobre la ribera del río Limay gracias a las altas temperaturas registradas. Guardavidas realizaron seis rescates de personas que fueron arrastradas por la corriente.

El subsecretario de Medioambiente y Protección Ciudadana, Francisco Baggio, indicó que tal como se esperaba, se registró una masiva presencia de personas en los cuatro balnearios de la ciudad y en tres zonas extendidas del Paseo Costero.

El Operativo de Seguridad Balnearia inició con la presencia de 145 guardavidas que cubrieron toda la costa con tareas preventivas hacia los bañistas. “Fue una jornada interesante por la gran cantidad de gente y se realizaron seis salvatajes , de los cuales dos resultaron con derivaciones por lesiones menores”, sostuvo el funcionario.

En ese sentido, explicó que el río Limay experimenta una gran crecida y está continuamente cambiando por las erogaciones de las represas hidroeléctricas: “Actualmente hay 360 metros cúbicos por segundo que es un volumen de agua interesante, por lo que se decidió hacer patrullajes con equipos náuticos y hubo prevenciones y rescates con motos de agua”.

Baggio indicó que en todos los casos, se trató de bañistas que se arrojaron al río en zonas muy correntosas y fueron arrastrados por el agua. Cuatro de los rescates se dieron en el balneario Gustavo Fahler (Río Grande), uno en Sandra Canale (Gatica al fondo) y otro en Valentina Brun de Duclot.

Además, un hombre debió ser derivado al hospital Castro Rendón luego de sufrir un corte en el pie por una botella de vidrio rota.

Por otro lado, Baggio advirtió por la presencia de adolescentes que se arrojan al agua desde el puente de calle Río Negro y aseguró que solicitaron a distintas autoridades para que tomen medidas que eviten estos actos.

“El lugar más conflictivo últimamente es el puente que comunica a la Isla 132 porque hay muchos adolescentes que lo usan de trampolín para tirarse el río. Hemos hecho intervenciones, prevenciones con guardavidas, ha intervenido la Policia y Prefectura, pero hay un grupo de jóvenes que no entra en razón”, comentó.

El funcionario advirtió que el puente tiene una altura de seis metros de alto y que la profundidad del río en esa zona es de un metro, por lo que las caídas pueden ser fatales.

“Hemos hecho los pedidos a Recursos Hídricos y Cordineu para que se intervenga la baranda de alguna manera y así evitar que las personas se arrojen al agua”, sostuvo.