Un puñado de entusiastas asomó como embajadores de Milei en la Provincia. Los mediocres de Cambiemos deberían preocuparse

Los personeros de Cambiemos en Neuquén (como Marcelo Bermúdez, Francisco Sánchez, Leandro López, Pablo Cervi, Juan Peláez y algunes más) deberían preocuparse con la presentación de los libertarios en la provincia, ya  que -cuando estos presenten su propia lista- dividirán votos con ellos.

Un dato no es menor: la gran mayoría de los seguidores de Cambiemos en NQN son adultes mayores… Bastante mayorcitos, para ser precios. Tal es así, que prácticamente no se les conocen seguidores jóvenes (a los que, en cambio, Milei sí sabe cómo llegarles).

Los mediocres de Juntos por el Cambio ya mostraron sus mezquindades cuando hace unos pocos meses les cerraron las puertas a Jorge Sobisch y a Carlos Eguía e hicieron que el partido perdiera no sólo las PASO y las elecciones de concejales, sino también hasta el nombre. No es joda: ahora se llama Cambia Neuquén. 

El hecho es que, hace unos pocos días, este entusiasta grupo de los ocho anunció que el Juzgado Federal autorizó la creación del Partido Libertario en el distrito de Neuquén y explicó que se trata de un partido que responde al movimiento liderado por Javier Milei y José Luis Espert.

En la foto aparecieron ocho, pero ojo porque parece que, por lo menos, tienen dos más. De hecho, el acta fundacional del partido llevó las firmas de Claudio Casasola, Daiana Rodríguez, Pablo Bianchi, Gabriela Grittini, Marco Cippitelli Diaz, Simón Puentes, Angélica Montenegro, Diego Carrera, Adriana Pérez Lizaso y Liana Estévez. La mitad desconocides y la otra mitad ignotes, pero en fin, ya dieron el primer paso.

Desde la fuerza política manifestaron que trabajan para impulsar en la región el movimiento, con mira a las elecciones presidenciales de 2023. Mientras tanto, en Cambiemos hay varios que se acostumbraron a vivir del Estado y deberían estar en alerta; uno de ellos es el diputado provincial de la UCR, César Gass. Don pedo lleva tantos años prendido a la teta del Estado, ya se debe haber empachado varias veces.