El Gobernador Omar Gutiérrez y su inacción ante las demandas urgentes de los trabajadores del Registro Civil han dejado una vez más en evidencia su desinterés por el bienestar de la ciudadanía.

Los trabajadores, quienes desempeñan un papel fundamental en la sociedad, han expresado su descontento de manera legítima.

Su lista de demandas es clara y justificada

Ingreso de personal: Más de 60 puestos de trabajo vacantes ponen en peligro la capacidad de los Registros Civiles para atender las necesidades de la comunidad. El Gobernador debe reconocer la urgencia de cubrir estas posiciones para garantizar un servicio eficiente.

Apertura de oficinas cerradas: El cierre de oficinas ha afectado gravemente la accesibilidad de los ciudadanos a los servicios del Registro Civil. Es esencial que se tomen medidas para reabrir estas instalaciones y restablecer la atención a la comunidad.

Compra de insumos: La carencia de insumos básicos como tóner y libretas familiares es inaceptable. Estos materiales son esenciales para el funcionamiento adecuado de las oficinas. El Gobierno debe asegurar su disponibilidad de manera inmediata.

La situación demanda una respuesta urgente por parte del Gobierno. Es imprescindible que el Gobernador Gutiérrez tome medidas concretas para abordar las legítimas preocupaciones de los trabajadores del Registro Civil y, en última instancia, servir mejor a la ciudadanía.

Este conflicto no solo resalta la falta de atención a las necesidades básicas de los empleados públicos, sino que también subraya la necesidad de una administración más eficiente y sensible a las demandas de la comunidad. El pueblo merece respuestas y soluciones concretas, y es el deber del gobierno proporcionarlas.