Minutos después de las 6 del jueves 1 de junio, el joven fue encontrado con dos impactos de bala en la cabeza , y fue llevado de urgencia al hospital de Zapala, donde horas después moriría.

El misterio rodea la trágica muerte del soldado voluntario Pablo Jesús Córdoba, de 21 años, quien perdió la vida en circunstancias sospechosas mientras realizaba una guardia en la Guarnición Militar Zapala, en Neuquén.

Su madre, Natalia Uribe, ha expresado su convicción de que su hijo fue víctima de un homicidio y ha destacado las inconsistencias en las declaraciones de los testigos, solicitando un cambio en la carátula del caso.

En entrevistas recientes, Natalia Uribe ha manifestado su creencia de que su hijo no pudo haberse infligido dos disparos, ya que cualquier herida le habría impedido volver a agarrar el arma y disparar de nuevo. Asimismo, señaló que el fusil no estaba en posición de automático según consta en el expediente. Estas afirmaciones han generado interrogantes sobre lo ocurrido y han llevado a la madre a exigir una investigación exhaustiva.

Pablo Jesús Córdoba, quien llevaba diez meses como soldado voluntario en el Grupo de Artillería 16, fue encontrado con dos impactos de bala en la cabeza y trasladado de urgencia al hospital, donde falleció horas más tarde. Las circunstancias en las que ocurrió el trágico suceso plantean dudas sobre la versión oficial de un posible suicidio.

"Quiero que investiguen, yo no sé si hay algo más. Para mí no hay dudas que esto fue un homicidio. Quiero que la Fiscalía se pongan a trabajar en un caso de esta magnitud"Natalia Uribe, madre del soldado

La familia ha puesto de relieve que existen contradicciones en las declaraciones de los testigos presentes en el momento del incidente. La ausencia del fusil en el cuerpo del soldado, según uno de los testimonios, contrasta con la afirmación de una enfermera de que se le habría quitado el arma. Estas discrepancias han intensificado el llamado de Natalia Uribe para que la fiscalía realice una investigación exhaustiva y reevalúe la carátula del caso.

Los padres de Pablo, tanto su madre como su padre, descartan la posibilidad de un suicidio, argumentando que el tipo de lesiones sufridas no permitirían la realización de un segundo disparo por parte del soldado. Además, enfatizan que su hijo no presentaba problemas de autoestima y era una persona alegre y llena de proyectos.

Ante este panorama, es imprescindible que las autoridades judiciales realicen una investigación meticulosa y objetiva para esclarecer las circunstancias en torno a la muerte del soldado voluntario Pablo Jesús Córdoba. La familia clama por justicia y espera que la verdad salga a la luz, proporcionando respuestas sobre este trágico suceso que ha dejado numerosas interrogantes sin resolver.

Fuente: Telam